JAVIER AKERMAN, UN AMIGO INDISPENSABLE

Hoy estoy aquí, simplemente esperando el transcurso de las horas. No tengo ganas de trabajar, pero trabajo igual, no tengo ganas de abrir los ojos pero los tengo abiertos y en este mes, que es especial, comienzo a rememorar momentos y gente, queridos amigos y amigas. Hoy quiero hablar de Javier, “JAVI” para mí, quien en la distancia me ayuda con mi salud y con mi ESPIRITU. Siempre con su mano tendida, y siempre, acaso, sabiendo lo que estoy sintiendo y luchando día a día con la depresión y ese deseo inalterable (pese a todo) de abandonar el mundo y alejarme del dolor.

{lloro}

Hoy es para vos este post, Javi, porque me enseñas que tengo que seguir todos los días, y que mi vida no es mía sino de todos: tuya, de mi madre, de mi padre que ya no está, de mis amigos ausentes y de mis amigos presentes, del mundo entero y que no soy yo quien debe disponer de ella sino el universo completo.

Tú, que me enseñas cada día que esta “ira” que tengo dentro es como una llama que lo puede arrasar todo y que tengo que cambiarla, transformarla en otra cosa, en paz, en compasión, en amor, en confianza, en fe en la vida y en los seres humanos.
Te quiero, por el amigo que eres, por el ser humano que eres y porque eres mi maestro.
Tu cumples conmigo mi CumpleBlog y espero que sigas a mi lado siempre, aunque siempre sea una palabra muy grande, yo la necesito.

Mil Besos