Tigre, tigre, que ardes
brillante
en los bosques de la noche:
¿qué mano u ojo inmortal
pudo delinear tu tremenda
simetría?
¿En qué profundidades o cielos
distantes
ardió el incendio de tus ojos?
¿Con qué alas se atreve su
aspiración?
¿Cuál es la mano que osa atrapar
tal
fuego?
Precioso. Corto pero intenso. Como el buen café. Un beso.
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