Había una vez
una mujer que había perdido su vida,
miró hacia abajo desde la cima
y se dio cuenta, tarde, que no
había hecho nada con su vida.
Cuando cruzó el umbral
pidió volver para intentar
hacer algo bueno y digno
en una vida tal vez corta
pero que le daría otra oportunidad...
una mujer que había perdido su vida,
miró hacia abajo desde la cima
y se dio cuenta, tarde, que no
había hecho nada con su vida.
Cuando cruzó el umbral
pidió volver para intentar
hacer algo bueno y digno
en una vida tal vez corta
pero que le daría otra oportunidad...
Porque en realidad no había amado,
ni había soñado, ni había deseado...solo había sufrido padeceres,
había odiado, había despreciado,
había olvidado ser persona.
Había una vez una mujer
que regresó del infierno de la soledad,
y lo dio todo en un abrir y cerrar de ojos,
y cuando nuevamente llegó a la cima
cruzó el umbral llena de luz divina.
que regresó del infierno de la soledad,
y lo dio todo en un abrir y cerrar de ojos,
y cuando nuevamente llegó a la cima
cruzó el umbral llena de luz divina.
© Verónica Curutchet
mujer olvido poesía año 2000 wilheminaqueen
Hola Vero,me encanto el texto.
ResponderBorrarUn beso.
Nyki
Bello texto.
ResponderBorrarRealmente hay momentos en los cuales me he sentido asi.
Gracias por tus vuelos por mi blog.
Bendiciones
HOMBRE CONDOR
La poesía permite en ocasiones soñar con segundas oportunidades... que la vida real casi nunca concede...
ResponderBorrarBesos
yo vengo a ver
ResponderBorrara esa mujer
invencible
grande
diminuta
fiera
ángel
con ella quiero
aprender
las rutas
del olvido
las arterias
del doler..
Besos
Nyki, me alegra te haya gustado!
ResponderBorrarun beso!
Hombre Cóndor:
ResponderBorrarcreo que no hay persona que no se haya sentido así en algún momento.
gracias por posarte en mi nido!
Mía,
ResponderBorraraquí la encuentras, creo
besos