Te descubrí entre escombros,
caminando solo a la intemperie,
desprotegido y sin embargo,
armado hasta los dientes
como si fueras a la guerra.
Te descubrí llorando
atrapado en el pasado,
que, aunque corto, por duro,
era demasiado largo....
Como un niño,
te descubrí desamparado,
loco de amor y abandonado,
con el corazón hecho pedazos.
Te descubrí en el desierto citadino,
bajo un cielo gris, plomizo,
caminando sin rumbo,
solo, con la armadura puesta
y todas tus heridas en un bolso.
Y así, casi un despojo,
me enamoré de ti
porque la luz en tus ojos
me desnudó tu alma.
©VERONICA CURUTCHET
precioso veronica...¡¡¡
ResponderBorrarnosotros te descubrimos a ti....asi con cosas tan sensitivas como esta...
un abrazo...¡¡¡
QUERIDA FIRE, MUCHAS GRACIAS, SOS UN SOL! MILES DE BESOS!
ResponderBorrarPRECIOSO!
ResponderBorrarBesos para ti
mar